El día en que la Iglesia universal reza por los misioneros y misioneras y
colabora con ellos en su labor evangelizadora, que con frecuencia se desarrolla
entre los más pobres.
En todo el mundo se celebra el cuarto domingo de octubre la Jornada Mundial de las Misiones en España la conocemos popularmente con el nombre de DOMUND. La Jornada Mundial de las Misiones es el momento culminante de una corriente de animación y cooperación misionera que debe desplegarse todo el año, especialmente, a lo largo de todo el “Octubre Misionero”, el mes de las misiones por excelencia.
En todo el mundo se celebra el cuarto domingo de octubre la Jornada Mundial de las Misiones en España la conocemos popularmente con el nombre de DOMUND. La Jornada Mundial de las Misiones es el momento culminante de una corriente de animación y cooperación misionera que debe desplegarse todo el año, especialmente, a lo largo de todo el “Octubre Misionero”, el mes de las misiones por excelencia.
En 1926
Pío XI estableció que el penúltimo domingo de octubre se celebrara en toda la
Iglesia el “Domingo Mundial de las Misiones”, en favor de la Obra Pontificia de
la Propagación de la Fe, para mover a los católicos a amar y apoyar la causa
misionera.
Desde 1943, esta “fiesta de la catolicidad y de
la solidaridad universal” se conoce en España como DOMUND (de DOmingo MUNDial).
Este nombre ha ayudado a identificar y difundir aún más esta jornada entre
nosotros, y su mensaje —una llamada de atención sobre la común responsabilidad
de todos los cristianos en la evangelización del mundo— ha calado en la profunda
sensibilidad y tradición misionera de nuestro país.
Los Territorios de Misión están confiados a la Congregación para la Evangelización de los
Pueblos y dependen en gran
medida de la labor de los misioneros y del sostenimiento económico
las Obras Misionales Pontificias de todo el mundo.Mediante el DOMUND, la Iglesia trata de
cubrir estas carencias y ayudar
a los más desfavorecidos a través de los misioneros.
Los misioneros presentes en los cinco continentes,
se convierten en los Mensajeros de la Palabra a quiénes todavía no la conocen.
Un trabajo que necesita de todo nuestro apoyo si tenemos en cuenta
que:
El 92% de las diócesis de
África son territorios de misión.
El 85% de las diócesis de
Asia son territorios de misión.
El 57% de las de Oceanía son
territorios de misión.
El 7% de las de América son
territorios de misión.
El 2% de las diócesis de
Europa son territorios de misión.