3 abr 2015

Viernes Santo



EN OJAL DE TU AMOROSO PECHO

Haber llegado con la Cruz al Monte.
Llevar el cuerpo flagelado en vivo.


Saberte Dios en  campo sensitivo
y divisar por dentro el horizonte…

Puso el dolor la rosa de la herida
en el ojal de tu amoroso pecho:
decidido Pastor que vas derecho
a abrazarte a la Cruz a tu medida.

Es la hora del viento y todo calla.
Las nubes se revuelven por la tarde.
El templo gime y la montaña espera.

Y Tú, Señor, metido en la batalla
del odio que, vencido, muere y arde


en el calor de tu divina hoguera.
Elpidio Ruíz Herrero

Semana Santa 2015