Siento si seguimos dándole vueltas a lo mismo, pero es que es tan profundamente serio lo que estamos viviendo que cuesta callar y volver la mirada, aunque la tentación sea querer estar ya hoy en Albanta, huir del país o del planeta.
Y es ahí donde quiero llegar, más allá de la presunción de inocencia o de la críticas a políticos, duques o nuestro vecino de al lado, sin olvidarnos de nosotros mismos, que puede que sea el mejor lugar para empezar. Es aquí y ahora donde tenemos que decidir y construir como cristianos. No es hora de desconfiar de todo, de agarrarnos al comportamiento de otros para justificar nuestra dejadez, es aquí y ahora, donde tenemos que construir y dar una señal distinta. Y sigue Pedro: «Es tarde, pero es madrugada si insistimos un poco». La tentación es huir, pero la llamada valiente es ayudar a construir Albanta o aquel país donde tú dices.
Ana Vázquez Ponzone (PastoralSJ.org)