No acaba de venir
la primavera.
Borrascas y
borrascas por la Ría
entran, traen la
misma melodía
del viento en la
larguísima ribera.
No acaba de llegar lo
que se espera
en este tiempo,
aquí y en este día:
Las parras tienen voz de cobardía.
Los huertos,
llantos mudos de quimera.
Las nubes se
apoderan de repente
del alto brillo que
se ve en las olas
y cae la lluvia
sin piedad ni engaño.
El tiempo y el amor son la corriente
que sigue el aire
del olvido, a solas
sin luz del día y
sin saber el año.
Elpidio Ruiz Herrero
Villanueva de Arosa
27 de Marzo 2018