DE MI BUEN AMIGO DON ANTONIO SINEIRO PADÍN
Veinte
años, Tucho, de Pastor y amigo
en
el fértil redil de San Ciprinano.
Siempre
delante con la voz de hermano
y
siempre al lado tu alma de testigo.
Suena
el viento con brisa de mendigo
y
salta raudo el vuelo de milano
hacia
la presa que le da a tu mano
el
ataque infernal del enemigo.
Sabio
Pastor. Celoso en la Doctrina.
Navegante
sin fin por la cañada
de
Dios buscando fértiles praderas.
Le
salen flores a la dulce harina
con
que alimentas a tu fiel majada
y
un suave amor por todas tus riberas.
Elpidio Ruiz Herrero
Villanova de Arousa