Era un 16 de septiembre
de 1957, solemnidad de nuestro Patrón San Cipriano, cuando el Cardenal Arzobispo de Santiago, D.
Fernando Quiroga Palacios, visitaba nuestro Pueblo para consagrar el altar de
la recién construida iglesia nueva.
Una mañana me decidí a
llamar a la secretaría del Sr. Cardenal, y tengo que decir que llamaba con muy
pocas esperanzas de recibir un sí por respuesta. Tenía pocas esperanzas porque
invitar a un Cardenal de la Iglesia, que vive en Madrid, que ha sido miembro de
varias congragaciones de la Curia Romana, presidente durante varios años de la
Conferencia Episcopal Española, que ha participado con su voto en los cónclaves
en los que han sido elegidos Papas Benedicto XVI y Francisco, que casó a los
Príncipes de Asturias, hoy Reyes de España;
pues como que tenía pocas esperanzas de que visitase una parroquia
pequeña como es la nuestra.
Marqué el número de
teléfono y la llamada tardaba en ser respondida pero al fin cogieron el
teléfono. Estaba hablando con la secretaria del Sr. Cardenal, y en nombre de
nuestro Párroco, invité al Sr. Cardenal a visitar nuestra Parroquia y a
presidir la Santa Misa y la procesión de Ntra. Sra. del Carmen. Le di toda la
información y la secretaria terminó diciendo que tan pronto viese al Cardenal
se lo diría y que me daría una respuesta lo antes posible. Y se terminó la
llamada.
No había pasado ni un
minuto cuando me suena el teléfono y veo que me llaman de Madrid. Respondo a la
llamada pensando escuchar un no, y al momento la secretaria me dice, son
palabras textuales: - Su Eminencia ha
dicho que el próximo 13 de Agosto viajará a Vilanova de Arousa para presidir la Santa Misa y procesión del
Carmen. Que por Tucho lo que haga falta-, así fueron sus palabras.
Ese mismo día empezamos
a preparar la visita, informando a la Corporación Municipal y a la Cofradía de
Pescadores “La Pastoriza”.
Mantuvimos varias
reuniones, pues organizar la visita de un cardenal no es fácil y no es algo a
lo que estamos acostumbrados, pero tengo
que decir que todo fueron buenas disposiciones y facilidades tanto del Sr.
Alcalde Gonzalo Durán como de la Patrona Mayor María José Vales.
Y después de prepararlo
todo llegó el día esperado, el 13 de agosto, aniversario de ordenación
sacerdotal de nuestro Párroco, un día soleado y esplendido.
A las 11.30 de la
mañana D. Antonio, Párroco; D. Juan Ventura y yo recibíamos a las autoridades
civiles en la Plaza San Mauro. Al Sr. Alcalde, Gonzalo Durán; a la Patrona
Mayor, Mª José Vales; a la Conselleira do mar, Rosa Quintana; al Capitán
marítimo; al Diputado provincial y concejal de Vilanova, nuestro vecino Javier
Dios; al presidente de la federación de cofradías de Pontevedra, al Patrón
Mayor de Cambados; al Patrón Mayor de la Illa de Arousa y concejales de
Vilanova de Arousa.
A las 12.00 llegaba el
Emmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio Mª Rouco Varela, Cardenal Emérito de Madrid,
acompañado del Ilmo. Sr. D. Carlos Álvarez Varela, Rector del Seminario Mayor
de Santiago de Compostela. Eran recibidos por las autoridades religiosas y
civiles mientras sonaban las campanas y la banda de música de Vilanova.
A continuación daba
comienzo la Santa Misa, cantada por D. Juan Ventura junto con el pueblo y preparada con esmero por el equipo de
liturgia, con la ayuda del seminarista D. Francisco Lampón, secretario del
Obispo Auxiliar. Al final pudimos vivir uno de los momentos más emotivos cuando
se cantó la “Salve Marinera” y el Sr. Cardenal le regaló a la Virgen un
escapulario bordado en oro sobre tisu de plata, realizado en el taller de
bordados artesanales “Corpus Christi” de
Granada, bajo diseño de Juan Spitzley Vilchez.
Al terminar la Santa
Misa, acompañamos al Sr. Cardenal al ayuntamiento en donde en un precioso acto
recibió el máximo distintivo que otorga el ayuntamiento Vilanovés, el “Mejillón
de Oro y Brillantes”. También recibieron el distintivo en este acto el
Conselleiro de Política Social José Manuel Rey Varela y el Humorista Touriñán.
A las 19.00 comenzaba
la procesión, quedando el Sr. Cardenal impactado de como las fábricas de
conserva saludaban a su Patrona.
Llegados al puerto, la
Estrella del Mar navegó por la Ría de Arousa. En medio de la Ría el Cardenal
rezó los responsos por los marineros fallecidos y se tiraron dos coronas al mar
en su honor. En el paseo marítimo se hizo la tradicional tirada de fuegos en
honor de la Virgen, se rezó una oración y mientras el Sr. Cardenal incensaba a
la Virgen, todos cantábamos “Estrella de los Mares”.
Al llegar a la iglesia
y antes de que la Virgen Santísima se despidiera de las calles hasta el próximo
año, se vivieron momentos emocionantes cuando empezaron a gritar “vivas” a la
Virgen del Carmen. Una vez dentro del templo y antes de que la Virgen subiese a
su altar, el Sr. Cardenal agradeció la invitación y manifestó que había sido
una pena que en tantos años como Arzobispo de Santiago nunca nadie le había
dicho que en Vilanova se hacía una fiesta tan maravillosa a la Virgen del
Carmen.
Tengo que decir que el
Cardenal se marchó de nuestro Pueblo, muy agradecido y muy contento por todas
las muestras de cariño que recibió a lo largo del día. Pero los que tenemos que
estar agradecidos somos nosotros porque como decía al principio, hacía 60 años
que Vilanova no recibía a un Cardenal y que venga desde Madrid a propósito a un
Pueblo pequeño como el nuestro es para estar muy agradecidos. El templo estuvo
abarrotado y la procesión fue de las más concurridas de los últimos años.
Muchas gracias Sr. Cardenal.