"No existe límite alguno para la misericordia divina ofrecida a todos".
La misericordia es la verdadera fuerza que puede salvar al hombre y al mundo del "cáncer" que es el pecado, el mal moral, el mal espiritual. Solo el amor llena los vacíos, las vorágines negativas que el mal abre en el corazón y en la historia. Solo el amor puede hacer esto, y esta es la alegría de Dios.
Ángelus, 15 de septiembre de 2013