Todo respira Amor.
La mesa puesta:
el pan labrado
con la Luz, el vino,
la voz cercana
en hálito divino
para el
encuentro de solemne Fiesta.
La brisa de la tarde
está compuesta
de nubes rojas y de
aroma fino.
Una trágica queja
del destino
y todo un Hombre-
Dios, como respuesta.
Jueves Santo:
Misterio y hendidura
por donde asoma la
Palabra y dice
lo que se quiere que
perdure y viva.
Todo respira Amor.
Arquitectura
firme del que se da,
del que bendice
con sed de redentora
tentativa.
Elpidio Ruíz Herrero
Semana Santa 2015