Nosotros en nuestra
parroquia valoramos muchísimo el trabajo que se hizo de “Materiales para la reflexión en los grupos sinodales”, pero
creemos que mejor sería que para LAS SUGERENCIAS Y PROPUESTAS enfocáramos más
concentradamente el foco de luz en unos RETOS
y en unas PROPUESTAS.
Unos RETOS concretos,
claros y urgentes que hoy nos
plantea esta sociedad a la iglesia y
Unas
PROPUESTAS, también concretas y eficaces que respondan a tales retos.
PRIMER RETO: ¿Qué Iglesia tenemos y que
Iglesia queremos?
·
Tenemos una Iglesia: DE CRISTIANDAD, tremendamente clerical,
moralizante y que “primeréa” lo canónico, legal y normativo más que lo
misionero y evangelizador.
*
Poco creíble y convincente…
·
QUEREMOS UNA IGLESIA MÁS EVANGELIZADORA
Y MISIONERA
*
Una Iglesia más auténtica y cercana, sobre todo a los pobres, humildes y
sencillos…
*
Que manifieste a la sociedad de hoy el verdadero rostro de Cristo.
PROPONEMOS:
*
Que el Sínodo Diocesano comience a
dar pasos concretos y decididos con los sacerdotes, religiosos /as, y laicos
para cambiar la mentalidad y la pastoral de Cristiandad por una mentalidad y
una pastoral misionera y evangelizadora.
SEGUNDO RETO: ¿Cómo se está realizando, hoy, la educación de LA FE, LA
ESPERANZA Y LA CARIDAD con los fieles de nuestras parroquias?
*
Creemos que en nuestra diócesis:
Hay bastantes parroquias que no tienen ningún tipo de catequesis, ni se
estudia para nada, ningún tipo de catecismo. Ni con la infancia, ni con jóvenes,
ni con adultos; tanto en la familia como en la comunidad parroquial se hace
ningún tipo de actividad para dar a conocer a Cristo, y a su mensaje.
*
Hay muchas parroquias en las que solo se estudia el
catecismo de corte tradicional y de cristiandad, pero no se hace la catequesis…
*
Hay parroquias que tienen más que catequesis, clases de
catecismo de tipo escolar: Fichas, explicaciones, dibujos, dossier…
·
Nosotros queremos y pretendemos que
la catequesis siga las directrices que nos marcaron los últimos Papas y que
este, el Papa Francisco, recoge en la carta Apostólica “Evangelli Gaudium”.
Una catequesis KERIGMÁTICA. (Que
presente el primer anuncio: Cristo muerto y resucitado) que acerque a los
catequizandos al Cristo del Evangelio (EVANGELIZADORA),
y que nos acerque, amemos y
viven-ciemos los misterios de nuestra fe (MISTAGOGICA).
PROPONEMOS:
*
Que partiendo de las experiencias y
niveles de fe de los catequizandos, y partiendo del Evangelio (de los domingos) y apoyados por los catecismos de la
Iglesia Católica y de la C.E.E., acerquemos los catequizandos a Cristo, para
experimentar, vivir y celebrar la fe, la esperanza y la caridad cristianas.
*
Para ello pedimos que el Sínodo
diocesano estudie la manera de preparar a los agentes de la Pastoral
catequética en este sentido.
*
Aquí en nuestra parroquia lo llevamos
experimentando hace varios años.
TERCER RETO: LOS LAICOS: FUERZA DE LA IGLESIA
Los laicos siguen teniendo aun en la iglesia poca presencia apostólica.
*
Después de que el Concilio Vaticano II (1965) en el capítulo
IV de la Constitución “Lumen Gentium”, tratará sobre los Laicos, se esperaba
una progresiva mayor presencia de los LAICOS en la acción apostólica,
litúrgica, educativa y administrativa de la Iglesia. Aún cuando reconociendo,
que en este sentido ha avanzado un poco, creemos que el papel que le
corresponde a Los Laicos por su vocación bautismal (sacerdotes, profetas y
reyes) sigue siendo muy pobre y muy reducido en las parroquias. El miedo a que eclipsen al sacerdote ha
llevado a estos a no darles el “papel” que le corresponde y a no hacerles
totalmente “participes de la misión
salvífica de la Iglesia, apostolado al que todos están destinados por el Señor
mismo, en virtud del bautismo y de la confirmación…
·
PREPARAR LAICOS EN PARROQUIAS
PROPONEMOS:
Que nuestro Sínodo prepare y ponga en marcha un programa para poder elegir, en las parroquias, hombres y mujeres comprometidos con Cristo en orden a ser preparados espiritual y eclesialmente para ser colaboradores fieles y sinceros con los pastores de las Iglesias parroquiales, en todo tipo de misiones que para ellos sean permitidos.
Que nuestro Sínodo prepare y ponga en marcha un programa para poder elegir, en las parroquias, hombres y mujeres comprometidos con Cristo en orden a ser preparados espiritual y eclesialmente para ser colaboradores fieles y sinceros con los pastores de las Iglesias parroquiales, en todo tipo de misiones que para ellos sean permitidos.
CUARTO RETO:
EL
SACERDOTE PARA LA IGLESIA DE HOY
·
¿Qué sacerdote tenemos?
·
¿Qué sacerdote necesitamos y queremos?
Que la Iglesia sigue y seguirá necesitando del sacerdote, pastor, es
indiscutible. Pero en una mirada serena y rápida de la realidad, nosotros
advertimos que el tipo de sacerdote que hoy la Iglesia ofrece a la sociedad y
en concreto a la Iglesia de Jesucristo es preocupante, desalentadora y poco
convincente.
-En general hay ya pocos sacerdotes y los pocos que hay son mayores y
achacosos. Apenas tienen fuerzas ya para celebrar, confesar… y poco más.
*
Vocaciones, tanto sacerdotales como de
consagrados: Religiosas y religiosos apenas hay y apenas se fomentan…
*
Ante situaciones nuevas y desconcertantes que surgen
actualmente, nos desbordan: Jóvenes anti-religiosos, anti-clericales… parejas de hecho, divorciados, tensiones
familiares etc…
*
Los sacerdotes, prácticamente, entre las
celebraciones de Misas, funerales, aniversarios… se gastan y desgastan
diariamente tanto que ya quedan sin fuerzas para una labor más pastoral,
catequética, evangelizadora…
*
Y sobre todo, en general, el sacerdote hoy tiene
poca profundidad espiritual; no son hombres de oración y de piedad, servicio,
entrega y meditación del Evangelio…
¿QUÉ SACERDOTE NECESITAMOS Y QUEREMOS?
Nosotros creemos que el sacerdote, como “otro Cristo”, debería tener más altura y profundidad
espiritual, vivir más unido a Cristo y celebrar los Sacramentos, sobre todo el
Sacramento de LA EUCARISTÍA, con más dignidad, devoción y unción sacerdotal.
*
Vivir intensamente sus compromisos sacerdotales, la
fraternidad sacerdotal y con sus fieles la fe, la esperanza y caridad
cristianas propuestas por el Evangelio.
*
Y formar con “aquellos laicos comprometidos”, un equipo
de pastoral digno y preparado para servir hoy a la Iglesia del Señor en su
parroquia y otras parroquias de la diócesis.
PROPONEMOS:
que del Sínodo Diocesano se origine un equipo que estudie, realice un “PROYECTO-VADEMECUM” para el sacerdote que hoy necesita la Iglesia.
que del Sínodo Diocesano se origine un equipo que estudie, realice un “PROYECTO-VADEMECUM” para el sacerdote que hoy necesita la Iglesia.